domingo, 2 de marzo de 2025

18-2-25 ARRIZURIGANA Y FAROLA desde Larrabetzu

 18-2-25 Arrizurigana y Farola, desde Larrabetzu 

Nos reunimos a las 9,45 12 jubiltaldeos en la taberna Irusta en la plaza de Larrabetzu. Después de tomar el café, emprendemos la marcha hacia el objetivo principal de hoy: Arrizurigana. Llegamos y rebasamos los pabellones del polígono industrial y torcemos hacia la izquierda, pasamos por debajo de la carretera y comenzamos la subida por una pista ancha pero bastante embarrada en sus inicios. A medida que ibamos alcanzando altura el barro se hacía más duro y practicable. 

La subida era constante, dejamos a un lado la modesta cumbre de Txispamendi y llegamos a la cumbre del Arrizurigana, 325 metros, incluida en el catálogo de Centenarios, hacia las 11,30 horas. Como es pronto nos desplazamos por un bosque curioso hasta la cumbre de Farola tontorra, 275 metros y regresamos al Arrizurigana para el ángelus y la manzana. 

Emprendemos el descenso por la vertiente contraria, al principio por una pista ancha y cómoda que pronto se convierte en un barrizal peor que el de la subida. Y así hasta que alcanzamos ya una pista asfaltada en el barrio de Maruti que nos deja en el centro de Larrabetzu. 

Cambio de ropa y de calzado y nos dirigimos al restaurante Katxi, de Morga, donde tomamos el aperitivo por cuenta de un jubiltaldeo que celebra su futuro cumpleaños. La comida a muy buen nivel, sobre todo las alubias rojas y la merluza, esta vez regada con un crianza Ramón Bilbao. Bastante lleno el comedor para ser un martes. 

Café en la terraza y vuelta a los orígenes. 



11-2-25 SENDA FLUVIAL RIO AGÜERA

 11-2-25, senda fluvial Rio Agüera 

Quedamos a las 9,45 en el bar del hotel Arenillas, en Islares, para el café. La posible comida ahí mismo se nos frustra pues está todo lleno hasta la bandera y no hay cabida para los 14 jubiltaldeos de hoy. El equipo de logística encuentra rápidamente sitio en el asador Erillo, en el mismo Islares. 

Nos desplazamos a Oriñon, donde dejamos los coches, emprendiendo un camino, más bien senda pegada al rio Agüera, que nace en las estribaciones del Burgueño, a unos 600 metros de altitud, a unos 30 kilometros. 

Estamos en marea baja y afloran los arenales de las orillas y nos permite ver algunos ejemplares de pollas de agua y garceta común. 

Pronto desembocamos en una pista ancha que a veces se torna sendero muy cerca del río, cruzando varios barrios como Lendagua, Tresagua, La Magdalena, hasta llegar al barrio del puente de Guriezo. 

La manzana la comemos en una placita del barrio y regresamos a los coches por el mismo camino de ida, con algunas pequeñas variaciones. 

El aperitivo lo tomamos en el mismo sitio de la comida, en la terraza, al sol. El aperitivo es por cuenta de un jubiltaldeo que ha cambiado de década llegando a los 80. La comida muy bien, con impresionantes vistas a la cercana Peña Candina y a la ballena de Sonabia. 

Se ha levantado algo de viento y el café lo tomamos en el interior, regresando a nuestros orígenes.