LOBANTZO , 683 M – URIZAR 674 M..
Puntualmente, a las 9,45, nos juntamos 10 jubiltaldeos en la plaza de Orozko y tomamos ellcafecito en el batzoki, para acto seguido, una vez pertrechados para la marcha, la iniciamos en el mismo aparcamiento donde hemos dejado los coches hacia las 10,15. El día es fresco, 4 grados al llegar a la localidad, pero soleado.
Nos dirigimos al barrio de Beraza y luego al de Garai abordando las rampas de subida, que con grandes zigsags nos van aupando hacia la cumbre. El ambiente es distendido y da ocasión para comentar las últimas noticias, sobre todo las relacionadas con el Athletic y su triunfo en la supercopa. Rebasamos el cartel que nos indica que estamos en el Parque Natural de Gorbea, que nos recalca que los perros deben ir atados. Ya cerca de la cumbre desechamos algunas pistas que nos llevan a ella por tener barro y proseguimos la pista principal hasta el collado situado entre las dos cumbres de hoy, retrocediendo para alcanzar la cumbre del Lobantzo o Lobantxu, 683 metros, hacia las 12,15.
El viento sur que habíamos sentido en las últimas rampas es fresco y no recomendable para parar a tomar la manzana, por lo que retrocediendo de nuevo hasta el collado, lo rebasamos y abordamos la cumbre del Urizar, 674 metros. Después de la foto y todavía con fuerte viento sur, proseguimos hasta el collado Urizar donde al sol y algo al resguardo, tomamos la manzana. Desde aquí podemos apreciar el cordal de estos montes de Arno, cercano el Kurutzegana, con su menhir en el collado y un poco más lejos el Kolometa, ya con apreciable nieve en sus laderas.
Ahora es todo descenso, por buena pista, para enlazar, más abajo, con el camino de subida. Pasamos junto a un recinto con unas cuantas vacas con buena provisión de hierba que les acababa de dejar un camión que nos adelantó en la subida. La bajada nos permite contemplar una vista espectacular del Ganekogorta y Gallarraga, con buena cantidad de nieve.
Sin más llegamos a los coches hacia las 14,10. Para entonces se había reservado mesa en el restaurante palacio Anunzibay, ya conocido de otras veces, y después de despedir a los compañeros que regresan a casa, nos dirigimos a la cafetería del restaurante donde nos esperan unas cervecitas y otras bebidas.
El menú, como otras veces, es bueno y variado, bien atendidos, en un comedor en el que estamos prácticamente solos, ya que la amplitud de los mismos permite distribuir a los comensales sin apreturas. El café lo tomamos en los mismos sillones, con mantas, donde habíamos tomado el aperitivo, y a una hora prudencial retornamos a los puntos de origen.
Datos técnicos de la excursión: Prácticamente 4 horas de caminata, 14 km. recorridos y un desnivel acumulado de 550 metros.
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