MALMASIN
24/01/2017
Después del fallido intento de hace tres martes hoy ha sido el día elegido por el guía Alfa para cumplir con la tradición.
Del tiempo no nos podemos quejar y la asistencia es masiva hasta el punto de que estamos todos (1+13) jubiltaldeos con lo que se logra un pleno, qué menos, ya que de los jubiltaldeos operativos no ha fallado ninguno.
Tras tomar el café en la estación de Abando, cogemos el tren de cercanías a las 10:05 y nos bajamos en Arrigorriaga.
Empezamos la marcha a las 10:20 y caminamos por carretera asfaltada con pendiente ascendente de esas que permite ir charlando hasta llegar, después de 40 minutos a la ermita de S. Martin de Finaga (reconstruida en el siglo XVIII) y en cuya base se ha descubierto un asentamiento romano del s.IV.
Andamos un poco más y nos encontramos en el barrio de Brisketa donde se acaba la carretera y entramos una senda estrecha de piedra y tierra-barro hasta llegar a la mítica cumbre a las 11:30 tras un paseo triunfal y cómodo que por algo fue el monte elegido por los fundadores.
Estamos un buen rato con foto y amaiketako incluido, amaiketako que una vez más se comparte con los de las manos en los bolsillos. Hombre, subir al Malmasín no es una gesta que no requiere la mochila nodriza del guía Alfa pero al menos llevar una pequeña mochila no me parece mal y máxime siendo el monte que es, por aquello de las apariencias
A las 12 empezamos a bajar y en el barrio de Brisketa tomamos una pista a la izquierda que nos llevará hasta el casco urbano de Basauri.
Como hay tiempo seguimos andando por zona urbana hasta llegar a Etxebarri. Reservamos mesa en el Ortzi ya conocido de otras veces y nos vamos de bares hasta la hora acordada. Paramos en el que más nos gusta donde nos cae un caldito con picatostes. Como estamos a gusto, unos fuera al sol y otros dentro al socaire terminamos de hacer tiempo tomando un txakoli o crianza por barba. Un jubiltaldeo se ha conformado solo con una caña.
Al final han sido casi 10 Km. en 2 horas y 50 minutos descontadas las paradas.
Comemos, por cuestiones de espacio, en dos mesas donde ha reinado la armonía y los ricos alimentos. El ecónomo se nos viene arriba y se atreve a traspasar la línea de los 15€ hasta llegar a los 20€ con el pretexto del billete del tren y del donativo que habitualmente solemos hacer a la Organización Nacional de Apuestas del Estado.
Salvo los de la parte alta de Bilbao que se van a casa andando, los demás nos metemos en el metro para ir a nuestros respectivos lugares de empadronamiento.
Esta reseña homenaje al Malmasín se ha escrito en Algorta y, como me ha quedado un poco escuchimizada por falta de emociones fuertes aprovecho, como colofón, para poner una nota sobre la amistad porque el monte se lo merece dado su significado para Jubiltaldea.
“Un buen amigo equivale a una buena medicina así que un buen grupo de amigos equivale a una farmacia completa”
martes, 31 de enero de 2017
jueves, 26 de enero de 2017
17-1-2017 RUTA DE LAS ERMITAS
RUTA DE LAS TRES ERMITAS DE LEIOA
17/01/2017
Sin amenaza de lluvia pero con augurios de frío polar quedamos a las 9:30 en el bar habitual detrás de la estación de Gobela.
Nos juntamos 12 (1+11) jubiltaldeos a las órdenes del guía beta por ausencia del guía alfa.
Tras el café y más o menos a las 10 comenzamos a andar. Hay un trasvase de mandos y todos pasamos a depender de la autoridad del ecónomo que tiene certificado y comprobado un amplio conocimiento de la zona.
Dejando a la izquierda el palacio de Artaza subimos una ligera cuesta hasta alcanzar el depósito de agua y desde aquí teniendo la ría a nuestra derecha llegamos a la primera ermita situada en el barrio de Ondiz, también conocida como Andra Mari de Ondiz o Nª Sª de los Remedios (nota del autor).
Próximos a ella están la casa torre de Ondiz y la casona Atxutene con una hornacina, ahora vacía, dedicada a S. Canuto.
Después de una serie de elucubraciones acerca del porqué la existencia en Leioa de un rey danés y encima santo seguimos ruta pasando por detrás del Ayuntamiento y la parroquia de S. Juan Bautista hasta llegar al parque de Mendibide donde se encuentra un caserón tipo caserío que por su porte tiene el calificativo de palacio donde se encuentra la sede de la D.O: Bizkaiko Txakolina.
Andamos un buen rato y después de la residencia de la Diputación llegamos a la segunda ermita, la de Santimami que según google está en Erandio.
Anda que te anda, sube que te sube y baja que te baja pasamos por el Eroski de Artea donde un camino vallado (la única zona con yerba y barro) nos hace retroceder para poder tomar la carretera que sube a Artea. Como son las 12 pasadas hacemos una paradita para poder tomar o mejor dicho compartir un frugal amaiketako ya que parte del personal entendió mal lo del paseo y se nos ha presentado, abrigados sí, con las manos en los bolsillos.
Por la zona de Negurigane a la 1 estamos en la tercera ermita, la de S. Bartolomé y desde aquí, cumplido el objetivo nos dirigimos, pasando otra vez por el Ayuntamiento, al casco urbano de Leioa para cumplir con el aperitivo sentados en una terraza en la que con sol se está muy agradablemente. Mientras, una expedición formada por dos exploradores se acerca al batzoki para reservar sitio.
A las 2:15 estamos sentados. La comida bien cocinada, las raciones satisfactorias pero la variación en el menú bastante pobre ya que solo tenemos para elegir dos primeros y dos segundos.
Pronto nos levantamos de la mesa. A la salida el frío ha aumentado acentuándose por la sensación térmica. Unos vamos al metro, que está un poco lejos, otro se va hacia Bilbao andando pero por cerca de las estaciones del metro por si acaso y todos los de Costa Elegante andando.
Al final casi han sido 14Km con un desnivel acumulado de 386m. bien dirigidos y bien explicados, con un costo de 14 € incluidas las provisiones para juegos de azar.
Se ha escrito esta piadosa reseña, para dejar constancia del día, en la parte alta de Algorta a dos días de que Trump sea entronizado como presidente U.S.A.
17/01/2017
Sin amenaza de lluvia pero con augurios de frío polar quedamos a las 9:30 en el bar habitual detrás de la estación de Gobela.
Nos juntamos 12 (1+11) jubiltaldeos a las órdenes del guía beta por ausencia del guía alfa.
Tras el café y más o menos a las 10 comenzamos a andar. Hay un trasvase de mandos y todos pasamos a depender de la autoridad del ecónomo que tiene certificado y comprobado un amplio conocimiento de la zona.
Dejando a la izquierda el palacio de Artaza subimos una ligera cuesta hasta alcanzar el depósito de agua y desde aquí teniendo la ría a nuestra derecha llegamos a la primera ermita situada en el barrio de Ondiz, también conocida como Andra Mari de Ondiz o Nª Sª de los Remedios (nota del autor).
Próximos a ella están la casa torre de Ondiz y la casona Atxutene con una hornacina, ahora vacía, dedicada a S. Canuto.
Después de una serie de elucubraciones acerca del porqué la existencia en Leioa de un rey danés y encima santo seguimos ruta pasando por detrás del Ayuntamiento y la parroquia de S. Juan Bautista hasta llegar al parque de Mendibide donde se encuentra un caserón tipo caserío que por su porte tiene el calificativo de palacio donde se encuentra la sede de la D.O: Bizkaiko Txakolina.
Andamos un buen rato y después de la residencia de la Diputación llegamos a la segunda ermita, la de Santimami que según google está en Erandio.
Anda que te anda, sube que te sube y baja que te baja pasamos por el Eroski de Artea donde un camino vallado (la única zona con yerba y barro) nos hace retroceder para poder tomar la carretera que sube a Artea. Como son las 12 pasadas hacemos una paradita para poder tomar o mejor dicho compartir un frugal amaiketako ya que parte del personal entendió mal lo del paseo y se nos ha presentado, abrigados sí, con las manos en los bolsillos.
Por la zona de Negurigane a la 1 estamos en la tercera ermita, la de S. Bartolomé y desde aquí, cumplido el objetivo nos dirigimos, pasando otra vez por el Ayuntamiento, al casco urbano de Leioa para cumplir con el aperitivo sentados en una terraza en la que con sol se está muy agradablemente. Mientras, una expedición formada por dos exploradores se acerca al batzoki para reservar sitio.
A las 2:15 estamos sentados. La comida bien cocinada, las raciones satisfactorias pero la variación en el menú bastante pobre ya que solo tenemos para elegir dos primeros y dos segundos.
Pronto nos levantamos de la mesa. A la salida el frío ha aumentado acentuándose por la sensación térmica. Unos vamos al metro, que está un poco lejos, otro se va hacia Bilbao andando pero por cerca de las estaciones del metro por si acaso y todos los de Costa Elegante andando.
Al final casi han sido 14Km con un desnivel acumulado de 386m. bien dirigidos y bien explicados, con un costo de 14 € incluidas las provisiones para juegos de azar.
Se ha escrito esta piadosa reseña, para dejar constancia del día, en la parte alta de Algorta a dos días de que Trump sea entronizado como presidente U.S.A.
martes, 10 de enero de 2017
10-1-2017 MALMASIN
INTENTO DEL MALMASIN
10/01/2017
Después de más de 15 días con buen tiempo aunque con mucho frío, hoy que tenemos previsto celebrar el nacimiento de Jubiltaldea que tuvo lugar por estas fechas hace ya 13 años con la subida al Malmasín, nos ha salido un día lluvioso y ventoso con todo su esplendor.
No obstante lo hemos intentado, vaya que si hemos intentado el rememorar y conmemorar aquella entrañable fecha, germen de lo que ahora es, y a mucha honra, el grupo Jubiltaldea que ha ido creciendo con el paso de los años, unidos por el cemento de la amistad, hasta llegar a los 21 componentes de ambos sexos que somos ahora.
No ha podido ser pese a nuestros esfuerzos.
Con la esperanza de que los pronósticos tan negros estén equivocados, como ya ha sucedido otras veces, nos hemos encontrado cinco jubiltaldeos, entre ellos solo un socio fundador, en el batzoki de Basauri. El número 13 definitivamente ha resultado gafe.
La cosa se presenta tan mal que dos han aparecido con paraguas, chubasquero, botas pero sin mochila confesando que su intención es la de tomar café e irse para casa.
Mientras lo tomamos, con toda la tranquilidad del mundo, se valoran las exiguas alternativas decidiendo por aclamación:
1º No subir al Malmasín que por cierto no se ve por las nubes que coronan su cumbre.
2º Salir a la calle para dar un paseo animados porque ha habido un momento en el que el cielo parece que se ha olvidado de echar agua.
Poco nos ha durado la alegría y al cabo de un rato se forman dos cordadas, una los de sin mochila se animan mutuamente para ir hasta Arrigorriaga y la otra se dirigen hacia Bilbao jugando con la posibilidad de andar cerca de las estaciones del metro.
A los segundos les coge un chubasco de proporciones bíblicas y tras guarecerse debajo de un puente llegan hasta Etxebarri. Se toman otro café por si se aclara el tiempo y se van para casa dando por finalizada la conmemoración.
Los primeros tienen más suerte y llegan hasta el famoso estanque de los cisnes pero a la vuelta se calan hasta los huesos. Con el fin de evitar males mayores para su salud anulan su intención de comer en Basauri y también se van a sus casas.
Y aquí se acaba la triste historia del treceavo Malmasin.
Menos mal que el jueves podremos celebrar la segunda parte de los fastos conmemorativos con el acto central de la comida de hermandad en el hogar navarro para la que estamos apuntados 20 jubiltaldeos y que no creo que el tiempo nos lo impida.
Se ha escrito esta breve pero sentida reseña, para que así conste en la historia de Jubiltaldea, en la parte alta de Algorta con un tiempo que, por cierto, sigue lluvioso y ventoso
10/01/2017
Después de más de 15 días con buen tiempo aunque con mucho frío, hoy que tenemos previsto celebrar el nacimiento de Jubiltaldea que tuvo lugar por estas fechas hace ya 13 años con la subida al Malmasín, nos ha salido un día lluvioso y ventoso con todo su esplendor.
No obstante lo hemos intentado, vaya que si hemos intentado el rememorar y conmemorar aquella entrañable fecha, germen de lo que ahora es, y a mucha honra, el grupo Jubiltaldea que ha ido creciendo con el paso de los años, unidos por el cemento de la amistad, hasta llegar a los 21 componentes de ambos sexos que somos ahora.
No ha podido ser pese a nuestros esfuerzos.
Con la esperanza de que los pronósticos tan negros estén equivocados, como ya ha sucedido otras veces, nos hemos encontrado cinco jubiltaldeos, entre ellos solo un socio fundador, en el batzoki de Basauri. El número 13 definitivamente ha resultado gafe.
La cosa se presenta tan mal que dos han aparecido con paraguas, chubasquero, botas pero sin mochila confesando que su intención es la de tomar café e irse para casa.
Mientras lo tomamos, con toda la tranquilidad del mundo, se valoran las exiguas alternativas decidiendo por aclamación:
1º No subir al Malmasín que por cierto no se ve por las nubes que coronan su cumbre.
2º Salir a la calle para dar un paseo animados porque ha habido un momento en el que el cielo parece que se ha olvidado de echar agua.
Poco nos ha durado la alegría y al cabo de un rato se forman dos cordadas, una los de sin mochila se animan mutuamente para ir hasta Arrigorriaga y la otra se dirigen hacia Bilbao jugando con la posibilidad de andar cerca de las estaciones del metro.
A los segundos les coge un chubasco de proporciones bíblicas y tras guarecerse debajo de un puente llegan hasta Etxebarri. Se toman otro café por si se aclara el tiempo y se van para casa dando por finalizada la conmemoración.
Los primeros tienen más suerte y llegan hasta el famoso estanque de los cisnes pero a la vuelta se calan hasta los huesos. Con el fin de evitar males mayores para su salud anulan su intención de comer en Basauri y también se van a sus casas.
Y aquí se acaba la triste historia del treceavo Malmasin.
Menos mal que el jueves podremos celebrar la segunda parte de los fastos conmemorativos con el acto central de la comida de hermandad en el hogar navarro para la que estamos apuntados 20 jubiltaldeos y que no creo que el tiempo nos lo impida.
Se ha escrito esta breve pero sentida reseña, para que así conste en la historia de Jubiltaldea, en la parte alta de Algorta con un tiempo que, por cierto, sigue lluvioso y ventoso
miércoles, 4 de enero de 2017
3-1-2017 LOBANTXU
LOBANTXU
03/01/2017
Estreno de año y estreno de monte pues es la primera vez que se sube a esta cumbre por parte de Jubiltaldea.
En Orozko, con temperatura en negativo que ha ido bajando progresivamente desde los 4º que teníamos en Algorta hasta el -1º, nos juntamos 10 (1+8+un invitado de la Pampa) jubiltaldeos animosos.
El día además de fresco tiene el sol garantizado que, aunque ahora todavía no calienta, pronto se pondrá el buzo de trabajo,
Con los cafés y zumos en el cuerpo, a las 10:15 todavía sin dar, nos ponemos en marcha pertrechados con todo tipo de prendas de abrigo dejando los coches en el aparcamiento del pueblo.
Primero por el barrio de Beraza y luego por el de Garai vamos, por carretera reglamentaria, contemplando los caserones bien en construcción, bien ya construidos o bien en restauración que van sucediéndose a ambos lados uno tras otro.
Acabado este último barrio tenemos un breve trecho hormigonado de cierta pendiente para luego pasar a una pista ancha de piedra y tierra apisonada sin nada de barro pero con abundante piñurri procedente de los pinos que flanquean el trayecto.
Desde que hemos dejado el pueblo no hemos hecho más que subir y subir. La pendiente ha sido constante, exigente pero sin exagerar, rota por algún falso llano más corto que la cola de un mosquito e incluso hemos tenido una bajadita que solo nos hemos dado cuenta a la vuelta cuando la hemos tenido que subirla.
En cualquier caso nos ha permitido mantener juiciosas y amenas conversaciones que nos han hecho entretenido el monótono paisaje de los pinos.
En un momento dado encontramos la señal que nos informa que para la cumbre nos quedan solo 700 metros.
Ahora dejamos la pista y tiramos hacia la izquierda por un camino amplio de tierra con algunos charcos que nos obligan a salirnos por la tangente para vadearlos.
Somos 7 los que formamos el grupo de cola. Los otros tres suponemos que han visto el cartel e irán por delante.
Gracias a los GPS que llevan el guía alfa y uno de sus lugartenientes, los últimos metros los hacemos subiendo monte a través porque, la verdad sea dicha, a partir de la desviación no existe ninguna señal.
Pasadas las 12, pero solo un poco, llegamos a la cumbre del Lobantzu de 678 m. y procedemos a preparar el amaiketako en el que hoy, por ser el día que es, tenemos cava, polvorones de la Estepa, uvas de Vinalopó, cacahuetes de Senegal y un popurrí de pasas, ciruelas y almendras amén de la tradicional pieza de fruta.
Esperamos un rato pero no aparecen los que faltan. Zozobra, intentos de hablar por teléfono, conjeturas y suposiciones hasta que por fin conectamos y les explicamos donde estamos. Vale, hacia allí vamos. Cambio y corto.
Pasan los minutos y disminuyen el cava y las viandas pero siguen sin aparecer pese a las llamadas y silbidos que se pierden en el bosque. Ultima llamada y “quedaros donde estáis” o sea que han vuelto otra vez a la señal del desvío. Recogemos rápidamente y al cabo de los 700 m. les encontramos a los tres perdidos, que en el ínterin y búsqueda han hecho otra cumbre.
Terminamos la otra botella de cava y los restos del amaiketako y como se nos ha hecho tarde con tanto silbido no nos queda más remedio que volver por donde hemos subido no sin antes recordarles a los perdidos que en el monte no se debe separar uno del guía que con sus lugartenientes es el que sabe y si se pierde nos perdemos todos y si nos tiene que rescatar el helicóptero sale más barato prorratearlo ente diez que entre tres.
Entre pitos y flautas pero con mejor temperatura llegamos a los coches cerca de las 2:30. Muda rápida y a comer al Palacio Anuncibai de sobra conocido por los jubiltaldeos y en el que tenemos garantizada la comida aunque no avisemos. Hoy sin embargo nos hemos quedado sin el txakoli-cerveza que tan bien sienta después del trabajo bien realizado.
Comemos, como siempre, bien y a gusto en un lugar que sin grandes alharacas nunca nos defrauda pero el hecho de no dejar los perolos en la mesa le privan de la categoría de templo dejándolo en iglesia gastronómica.
El café y los chupitos los tomamos en el “chill-out” que como no estamos en verano el fresco lo combatimos con unas mantas situadas junto a los butacones previstas para estos casos.
Queda más o menos concretado el plan para el Malmasín y la comida del jueves día 12 de Enero.
Para las 6 en casita a ducharse.
Se ha escrito esta reseña en la parte alta de Algorta casi en la víspera de que vengan los Reyes Magos que seguro tienen en cuenta lo bien que nos hemos portado durante todo el año
03/01/2017
Estreno de año y estreno de monte pues es la primera vez que se sube a esta cumbre por parte de Jubiltaldea.
En Orozko, con temperatura en negativo que ha ido bajando progresivamente desde los 4º que teníamos en Algorta hasta el -1º, nos juntamos 10 (1+8+un invitado de la Pampa) jubiltaldeos animosos.
El día además de fresco tiene el sol garantizado que, aunque ahora todavía no calienta, pronto se pondrá el buzo de trabajo,
Con los cafés y zumos en el cuerpo, a las 10:15 todavía sin dar, nos ponemos en marcha pertrechados con todo tipo de prendas de abrigo dejando los coches en el aparcamiento del pueblo.
Primero por el barrio de Beraza y luego por el de Garai vamos, por carretera reglamentaria, contemplando los caserones bien en construcción, bien ya construidos o bien en restauración que van sucediéndose a ambos lados uno tras otro.
Acabado este último barrio tenemos un breve trecho hormigonado de cierta pendiente para luego pasar a una pista ancha de piedra y tierra apisonada sin nada de barro pero con abundante piñurri procedente de los pinos que flanquean el trayecto.
Desde que hemos dejado el pueblo no hemos hecho más que subir y subir. La pendiente ha sido constante, exigente pero sin exagerar, rota por algún falso llano más corto que la cola de un mosquito e incluso hemos tenido una bajadita que solo nos hemos dado cuenta a la vuelta cuando la hemos tenido que subirla.
En cualquier caso nos ha permitido mantener juiciosas y amenas conversaciones que nos han hecho entretenido el monótono paisaje de los pinos.
En un momento dado encontramos la señal que nos informa que para la cumbre nos quedan solo 700 metros.
Ahora dejamos la pista y tiramos hacia la izquierda por un camino amplio de tierra con algunos charcos que nos obligan a salirnos por la tangente para vadearlos.
Somos 7 los que formamos el grupo de cola. Los otros tres suponemos que han visto el cartel e irán por delante.
Gracias a los GPS que llevan el guía alfa y uno de sus lugartenientes, los últimos metros los hacemos subiendo monte a través porque, la verdad sea dicha, a partir de la desviación no existe ninguna señal.
Pasadas las 12, pero solo un poco, llegamos a la cumbre del Lobantzu de 678 m. y procedemos a preparar el amaiketako en el que hoy, por ser el día que es, tenemos cava, polvorones de la Estepa, uvas de Vinalopó, cacahuetes de Senegal y un popurrí de pasas, ciruelas y almendras amén de la tradicional pieza de fruta.
Esperamos un rato pero no aparecen los que faltan. Zozobra, intentos de hablar por teléfono, conjeturas y suposiciones hasta que por fin conectamos y les explicamos donde estamos. Vale, hacia allí vamos. Cambio y corto.
Pasan los minutos y disminuyen el cava y las viandas pero siguen sin aparecer pese a las llamadas y silbidos que se pierden en el bosque. Ultima llamada y “quedaros donde estáis” o sea que han vuelto otra vez a la señal del desvío. Recogemos rápidamente y al cabo de los 700 m. les encontramos a los tres perdidos, que en el ínterin y búsqueda han hecho otra cumbre.
Terminamos la otra botella de cava y los restos del amaiketako y como se nos ha hecho tarde con tanto silbido no nos queda más remedio que volver por donde hemos subido no sin antes recordarles a los perdidos que en el monte no se debe separar uno del guía que con sus lugartenientes es el que sabe y si se pierde nos perdemos todos y si nos tiene que rescatar el helicóptero sale más barato prorratearlo ente diez que entre tres.
Entre pitos y flautas pero con mejor temperatura llegamos a los coches cerca de las 2:30. Muda rápida y a comer al Palacio Anuncibai de sobra conocido por los jubiltaldeos y en el que tenemos garantizada la comida aunque no avisemos. Hoy sin embargo nos hemos quedado sin el txakoli-cerveza que tan bien sienta después del trabajo bien realizado.
Comemos, como siempre, bien y a gusto en un lugar que sin grandes alharacas nunca nos defrauda pero el hecho de no dejar los perolos en la mesa le privan de la categoría de templo dejándolo en iglesia gastronómica.
El café y los chupitos los tomamos en el “chill-out” que como no estamos en verano el fresco lo combatimos con unas mantas situadas junto a los butacones previstas para estos casos.
Queda más o menos concretado el plan para el Malmasín y la comida del jueves día 12 de Enero.
Para las 6 en casita a ducharse.
Se ha escrito esta reseña en la parte alta de Algorta casi en la víspera de que vengan los Reyes Magos que seguro tienen en cuenta lo bien que nos hemos portado durante todo el año
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